Luego de una previa a la Navidad con temperaturas que se acercan a los 40 ºC, una alerta meteorológica para Navidad por calor extremo en el centro sur del país, las celebraciones de Año Nuevo están también bajo amenaza de un calor abrazador.
El reciente fin de semana sorprendió a muchos por el excesivo aumento de las temperaturas, mientras la preocupación crece ante la alerta meteorológica emitida por la Dirección Meteorológica de Chile (DMC) para los días 24 y 25 de diciembre, con temperaturas que superarían los 40 ºC en diversos puntos del centro sur del país.
El Servicio Nacional de Preparación y Respuesta ante Desastres (SENAPRED) también ha hecho lo suyo, emitiendo alertas amarillas para la población de cuatro regiones del centro y sur, ante el calor intenso previsto para los próximos días.
Esta situación extrema cálida se ha dado producto de la presencia de una dorsal cálida que ha permanecido por varios días sobre Chile, extendiéndose desde el norte y hasta la zona central, y que ya comienza su avance hacia el sur del país, afectando hasta la Patagonia con aumento de las temperaturas durante las celebraciones de Navidad.
La baja térmica costera que se ha formado sobre la zona central también contribuye al aumento de las temperaturas, principalmente en sectores interiores de valles y precordillera. Esta circulación lleva el viento cálido desde el interior a litoral, haciendo subir las marcas de los termómetros en sectores de la cordillera de la costa.
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Si bien esta situación sinóptica logrará disolverse a contar del jueves (26) producto del avance de un sistema frontal que llegará a la Patagonia durante el día 25 de diciembre, las temperaturas no lograrán descender mucho de los 30 ºC en el centro del país; la dorsal se debilitará por unos días, pero la perspectiva es que se refuerce en la previa a la llegada del Nuevo Año que ya está a la vuelta de la esquina.
Nuevo episodio de calor extremo cerrará el 2024, dándole la bienvenida al 2025
La presencia de la dorsal cálida, la baja costera y la advección cálida de un nuevo sistema frontal que se aproximaría hacia Chile serían responsable por dejar un nuevo episodio de altísimas temperaturas sobre las regiones más australes del país, en la transición al nuevo año.
La situación podría ser parecida al episodio de calor extremo que se vive por estos días navideños, aunque, la buena noticia, por el momento, es que las anomalías de temperaturas serían menos intensas que las previstas para esta semana.
¿Cuántos grados podrían marcar los termómetros durante la víspera del Año Nuevo?
Aunque sabemos que para tener un pronóstico preciso, tanto de lluvias como de temperaturas, necesitamos estar más próximos de la fecha, podemos hacernos una idea de la tendencia que los modelos están presentando y así ir acompañando su evolución en los próximos días.
Los datos que nos entrega el Centro de Pronóstico de Mediano Plazo (ECMWF) con sus diversos modelos nos indican que la tendencia será de altas temperaturas sobre los valles del centro sur y también sobre la Patagonia, mientras terminan los preparativos para la recepción del Año Nuevo.
El núcleo cálido de la dorsal se centrará sobre las regiones del sur de Chile, aunque ella estará bastante pronunciada, proyectándose más allá del mar de Drake. Esto se traducirá en un aumento importante de las temperaturas sobre la Patagonia, con temperaturas que en la mitad sur de Magallanes marcarán por sobre los 20 grados, no descartándose sectores donde podrían superar los 25 ºC.
El tramo más afectado por este episodio de calor serían los valles del Maule, Ñuble, Biobío y de La Araucanía, en donde las temperaturas podrían alzarse por sobre los 36 ºC en el último día del 2024.
Sectores de las regiones de Los Ríos y de Los Lagos, así como también en el tramo norte de la Región de Aysén podrían alcanzar marcas en los termómetros entre los 26 a 30 ºC.
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Aunque estos valores previstos muy probablemente se ajustarán en los próximos días, debemos estar atentos y preparados para despedir el 2024 en medio de un nuevo episodio de altas temperaturas casi generalizado sobre muchas regiones.
Los problemas que esto acarrea no sólo pueden comprometer la salud de las personas, sino que también dejan condiciones desfavorables para el combate de incendios forestales que, lamentablemente, han estado a flor de piel en las últimas jornadas de calor extremo que han antecedido a la Navidad, y que podrían volver a repetirse en el cambio de año.